Qué ver y hacer en Lisboa, en Portugal

Belén Valdehita

Lisboa es una ciudad llena de encanto, historia y animación, con muchos sorprendentes lugares que descubrir.

La ciudad de Lisboa, en Portugal
Fuente de la imagen: 101viajes

La capital del vecino país de Portugal, conocida como “La Ciudad de la Luz”, es un destino muy romántico. Está repleta de agradables y tranquilos rincones, pero también de bulliciosas calles. Es un destino ideal para una Luna de Miel, para una escapada de fin de semana o para pasar unos días de vacaciones.

En la villa lisboeta se aúnan tradición y modernidad, y el resultado es de lo más cosmopolita. Dotada de una gran belleza, está ubicada sobre siete colinas junto a la desembocadura del río Tajo en el Océano Atlántico. Súbete a uno de sus originales tranvías o siéntate en una de sus soleadas terrazas, y por supuesto sumérgete en su impresionante patrimonio monumental. Gracias a la gran oferta de hoteles en Lisboa, tendrás muy fácil encontrar tu alojamiento más adecuado.

Puente Vasco de Gama, en Lisboa

Fuente de la imagen: 101viajes

El tiempo en Lisboa

Tanto si visitas la ciudad en primavera como en verano, tendrás asegurado el buen tiempo, con unas agradables temperaturas en torno a los 28 grados centígrados. Los meses de otoño y de invierno resultan más lluviosos y ventosos, pero este desapacible tiempo no le resta el más mínimo encanto. No es raro que se conozca a Lisboa como “La Ciudad de la Luz”, ya que el sol luce sobre la población de una manera muy especial.

Qué ver en Lisboa

Prepárate para andar, o si lo prefieres utiliza el transporte público, pero no puedes perderte las empinadas calles del barrio antiguo o sus singulares plazas, donde no es extraño ver a los vecinos sentados en sillas que sacan a la calle para charlar o contemplar a la gente que pasa. Te recomendamos las plazas del Comercio, del Rossio o la Plaza del Marqués de Pombal.

Torre de Belem, en Lisboa
Fuente de la imagen: ViajarMundos

La capital lusa cuenta con una gran riqueza monumental. Son emblemáticos edificios como la Torre de Belém, cuyo origen fue defensivo, aunque luego se reconvirtió en faro; la Catedral de Santa María Mayor, popularmente llamada la Sé de Lisboa, o el Castillo de San Jorge, que posee una gran carga histórica.

Otras visitas imprescindibles son las del Monasterio de los Jerónimos, que acoge la tumba del descubridor portugués Vasco de Gama; el Monumento a los Descubrimientos, erigido para conmemorar el quinto centenario de la muerte de Henrique el Navegante, descubridor de Las Azores, Madeira y Cabo Verde; el Museo Nacional dos Coches, el Museo Nacional de Arqueología, el Oceanário de Lisboa, que es el segundo más grande de Europa, o los contemporáneos puentes de Vasco da Gama y el Puente 25 de abril.

Comer en Lisboa

La cocina tradicional lusa es muy peculiar, con sabores muy diferentes a los que estamos acostumbrados en España. Entre los platos más típicos se encuentran el caldo verde, que lleva col y patata; la sopa de nabicas, elaborada con hojas de nabo; el cocido a la portuguesa o los guisos de judías blancas o pintas acompañados con matanza, siendo estas últimas recetas más acordes a los gustos españoles.

Castillo de San Jorge, en Lisboa
Fuente de la imagen: Castelo de Sao Jorge

No faltan en los restaurantes lisboetas buenos pescados, mariscos y moluscos. Con ellos preparan deliciosas calderetas y sopas, como la cataplana de mariscos. El pescado más popular es el bacalao, que se prepara de un montón de maneras diferentes, pero todas muy ricas.

Un dulce muy tradicional son los pasteles de Belém, que junto a las piñonatas, los confites, el arroz con leche o las peras al vino, harán las delicias del paladar más goloso.

Motivos para viajar a Lisboa

Además de ser un destino muy cercano, Lisboa es una ciudad que encandila a cuantos la visitan, y no es extraño que regresen, porque siempre queda algo por ver o por descubrir. Cuenta con una completa infraestructura de alojamiento y restauración, además de ofrecer numerosas propuestas de ocio. La noche lisboeta es muy animada, y salir de compras en un auténtico placer.

Mirador de Gracia, en Lisboa
Fuente de la imagen: LOOC

Para conseguir excelentes fotografías panorámicas que llevarnos de recuerdo, lo mejor es hacer un recorrido por los más de 20 miradores que hay en Lisboa, y a los que se accede tras un atractivo trayecto en funicular. Y no olvides que, aunque la ciudad no dispone de playa, en sus alrededores encontrarás algunas fantásticas, como la de Cascais, la de Carcavelos, la de Oeiras o la Playa Costa Caparica.

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